Fabián Viña Negrón junto a su esposa María Luisa Pajarón fundaron en 1.582 una ermita a la advocación de San Andrés Apóstol, sobre un terraplén que dominaba la caleta o playa conocida entonces como Caleta de Viña y que luego pasaría a denominarse de Interián.

La construcción ha conocido diversos añadidos. En torno al año 1.900, la ermita fue ampliada, se mantuvo la puerta en su lugar y se prolongó hacia el naciente, duplicándose su longitud y permaneciendo intacta su anchura. Posteriormente, en 1.927, se construyó la sacristía y se sustituyó la pequeña espadaña que descansaba sobre su puerta por una moderna torre de tres cuerpos y dos campanas.

Desde su origen la ermita dependía de la parroquia de San Pedro de Daute hasta que en el año 1.963, el obispo de la diócesis nivariense, señor Franco Cascón, firmó el decreto de declaración de parroquia desgajada de la de San Pedro de Daute, para San Andrés en la Caleta de Interián.

Todos lo años en el mes de noviembre se celebran con gran júbilo las fiestas en honor de San Andrés Apóstol.