Excepcional casona construida en la finca homónima por don Alonso del Hoyo en el primer tercio del siglo XVII. Su privilegiada ubicación en un promontorio próximo al convento de San Sebastián le salvó de la devastación ocasionada en la Villa por la erupción de 1.706. En la planta baja construyó don Alonso del Hoyo, en 1.636, una ermita bajo la advocación de San Antonio.

Notable edificación que consta de varios cuerpos situados a distinto nivel. Posee una amplia balconada, que cubre toda la fachada principal adaptándose a la forma de U que tiene el edificio. Sus amplias salas, pasillos, tejados y capilla nos colocan ante un inmueble de belleza singular que, lamentablemente, está deshabitado, con el consiguiente peligro para su conservación.

Posee una original escalera de piedra, única en el Archipiélago, con escalones achaflanados, probablemente para permitir el acceso de las caballerías hasta la segunda planta, donde se encuentran la huerta y habitaciones en que se guardaban granos y aperos de labranza. También se maneja la hipótesis que esta solución arquitectónica se llevó a cabo para disimular la existencia de una gran roca que imposibilitaba otro modo de construcción. Una tercera opinión hace obedecer la extraña forma a simples soluciones artísticas.

Forma parte del Conjunto Histórico de la Villa y Puerto de Garachico. Actualmente es propiedad de la familia Brier y Ponte y no se puede visitar.